IBJR presentó un estudio económico sobre la regulación de apuestas deportivas en Brasil

El Instituto Brasilero de Juego Responsable le encargó el informe a Tendências Consultoria.

Brasil.- El Instituto Brasilero de Juego Responsable (IBJR) sigue al pie los avances en la regulación de las apuestas deportivas en Brasil. A la espera de su votación en la Cámara de Senadores, y luego de advertir las amenazas que el proyecto de ley 3.626/2023 supone para la industria, la entidad presentó ahora su propio informe.

El Instituto Brasileño de Juego Responsable, creado en marzo de este año, encargó este estudio a Tendências Consultoria. El objetivo fue sentar una base a fin de exigir cambios en el proyecto de ley que regula el sector.

«El documento podría frustrar la recaudación del Gobierno, ya que entiende que el proyecto de ley actual, con las nuevas reglas y requisitos, podría perjudicar las actividades de los operadores regulados en el país, ya que el impuesto a la carga, considerando sólo los impuestos indirectos, rondaría el 30 por ciento del GGR», afirmaron desde el IBJR en su cuenta de Linkedin. Y añadieron «Sin olvidar el pago previsto por una licencia de R$ 30m (USD 6.0m) por un período de hasta tres años y la tasa de inspección de hasta R$ 1.9m/mes (USD 388.112)».

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Principales puntos del informe

El estudio reconoce que el proyecto de ley tiene como objetivo crear un entorno propicio para el desarrollo de este mercado en el país, buscando garantizar la protección de los usuarios, la prevención y combate de prácticas delictivas y la generación de ingresos por impuestos y tasas. No obstante, asegura que «si este PL se aprueba con su redacción actual, las nuevas reglas y requisitos representarán un coste enorme para los operadores regulados, minando su atractivo».

Según el documento, aunque las contribuciones impuestas representan el 18 por ciento del RGB, compatible con el impuesto específico sobre las apuestas online adoptado en otros países, las empresas reguladas también estarán sujetas al pago de PIS, Cofins e ISS. Por ello, la carga tributaria, considerando sólo los impuestos indirectos, sería del orden del 30 por ciento del GGR.

A su vez, el informe precisa que el PL también prevé el pago de una licencia, fijada en hasta R$30m (USD6.0m) por un período de hasta tres años. Y a esto se suma tasa de inspección de hasta R$1.944.000 (USD386.767) por mes, dependiendo del tamaño del operador en relación al volumen de primas pagadas.

Por estos motivos, según el reporte, un operador de apuestas online que comience a operar en Brasil después de la regulación puede tener que gastar un monto de hasta el 68 por ciento del GGR sólo para cumplir con las obligaciones fiscales y de regulación. Considerando el pago del IRPJ y del CSLL, la carga tributaria puede ser significativamente mayor.

En esa línea, el informe asegura que este coste necesariamente se trasladará a los precios, que, en este mercado, se refleja en la cuota ofrecida por apuesta. De este modo, los operadores regulados deben ofrecer premios muy inferiores a los que se practican hoy.

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Desde la consultora, advirtieron que esto generará un alto incentivo para que un grupo de empresas opte por continuar operando en el mercado brasileño desde el exterior, sin cumplir ninguna norma en Brasil y sin pagar impuestos. En esta situación, aunque son reconocidos por la mayoría de los usuarios como operadores regulados, más seguros y fiables, la consultora advierte que inevitablemente perderán cuota de mercado frente a empresas no autorizadas. Esto «frustraría todos los objetivos de la regulación actualmente en discusión», aseguraron.

A partir de estos números, Tendências Consultoria supuso que el resultado más probable sería la formación de un pequeño mercado regulado compuesto por unas pocas empresas grandes, equivalente a sólo una parte del mercado potencial, que podría formarse en el caso de una regulación más adecuada. Con el crecimiento del mercado ilegal, cuyos operadores no pagan cualquier impuesto o tasa en el país, los ingresos estimados del nuevo la regulación no se materializaría. «En este escenario, la regulación sería inofensiva en términos de protección de los usuarios y prevención de prácticas criminales», insistió.

Asimismo, se perdería una importante oportunidad para frenar el amaño de partidos en el deporte, un problema que preocupa mucho en el fútbol brasileño, dados los recientes escándalos. A partir de los riesgos resaltados en el estudio, «es importante que la regulación del sector busque alcanzar un nivel de tributación más consistente con el practicado en otras jurisdicciones y, por tanto, obtener una tasa de canalización más alta».

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En cuanto a posibles soluciones, la Tendências Consultoria puntualizó algunas posibles medidas. Estas pueden incluir una revisión a la baja de porcentajes de asignaciones obligatorias, así como las tasas de montos y plazos de inspección y subvención, y cambios en el impuesto sobre la renta del apostante (como una reducción en la tasa y la posibilidad de pagar impuestos sobre el resultado neto calculado por período, por ejemplo, un mes).

«La experiencia internacional indica que la creación de un entorno propicio para el desarrollo del mercado regulado de apuestas online, con sana competencia entre operadores, está relacionado con la existencia de un marco regulatorio robusto, que establezca los derechos y obligaciones de los participantes en este mercado sin crear una carga excesiva y flexibilidad para dar cabida a innovaciones y diferentes modelos de negocio», concluyó el documento.

El Instituto Brasileño de Juego Responsable (IBJR) nació a partir del debate en torno a la regulación de las apuestas deportivas en Brasil y la polémica que se desató tras la investigación denominada Operación Máximum II. La entidad enrola a 10 operadores internacionales de apuestas deportivas: bet365, Flutter, Entain, Betsson Group, Betway Group, Yolo Group, Netbet Group, KTO Group, Novibet y LeoVegas. También a una empresa de juegos de fantasía (Rei do Pitaco), dos de pago (Pay4Fun y Grupo OKTO) y un grupo de medios (Better Collective).