Sancionan un proyecto para regular las carreras cuadreras en Tucumán
Aprobado por el Poder Legislativo, este tipo de competencia hípica está cada vez más cerca de volver a las pistas de toda la provincia.
Argentina.- Las carreras cuadreras en Tucumán están cada vez más cerca de volver al ruedo gracias a la sanción del Poder Legislativo sobre el proyecto de ley que busca darle un marco legal a esta competencia suspendida desde fines de marzo.
La iniciativa presentada por el legislador Enrique Bethencourt (Frente de Todos) fue aprobada ayer, jueves 2 de junio, y pretende restablecer las carreras cuadreras en la provincia, derogando la normativa que rige desde 1952.
La decisión de suspender la actividad en casi toda la provincia porque estaba regulada por una ley muy antigua que precariza su funcionamiento. Por ese motivo, hasta que no se apruebe una nueva ley, el gobernador Osvaldo Jaldo dispuso que las carreras sólo tuviesen lugar en el Hipódromo de Tucumán.
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Durante su discurso, Bethencourt destacó que la actividad tiene un impacto positivo en la economía y en la vida social de los pueblos del interior; razón por la cual consideró importante que “sea restablecida de inmediato» en toda la provincia.
Entre los beneficios del proyecto se destacan las mejoras en seguridad, «tanto para quienes compiten como para quienes asisten». Vale recordar que este punto fue determinante para decretar su suspensión, ya que las autoridades gubernamentales aseguraban que organizadores, espectadores y animales estaban a la deriva.
A pesar de recibir el apoyo general de todo el oficialismo, la iniciativa fue rechazada por los bloques del Partido por la Justicia Social (PJS) y Fuerza Republicana (FR).
El republicano Ricardo Bussi (FR) reprochó que el texto no pasó por la comisión de Deportes, que está a su cargo, y cuestionó aspectos técnicos de la iniciativa al igual que Walter Berarducci (PJS), quien advirtió que la propuesta no contempla «un elemento esencial de las carreras cuadreras, que son las apuestas y el juego».
Las propuestas
El proyecto de ley presentado por el bloque oficialista tiene como objetivo derogar la Ley 2.484, “que posee diversos artículos que quedaron obsoletos, debido a que, en las carreras cuadreras, se han incorporado usos que en aquella época” no regían.
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La propuesta resume cinco puntos clave como:
- Incorporar la exigencia de habilitación de canchas cuadreras.
- Establecer acondicionamientos mínimos que debe contar el predio para poder obtener su habilitación.
- Establecer la obligatoriedad de contar con un permiso para poder celebrar las carreras cuadreras.
- Fijar una guardia mínima de policías que deberán estar afectados particularmente a los días de carrera.
- Declarar nuevas reglas que atañen exclusivamente a las carreras cuadreras.
A su vez, uno de los puntos centrales del artículo es que establece que “toda carrera cuadrera estará bajo control el control directo del juez de Paz de la localidad donde se celebre la competencia equina”.
El texto establece que será el juez de paz quien “designará a un delegado que, especialmente, actuará en su nombre durante la competencia, quedando prohibido que tal designación recaiga sobre autoridad policial o un empleado de este (sic)”
Por otro lado, se consigna que las canchas cuadreras deberán cumplir con una serie de requisitos, como una “pista debidamente acondicionada”; y un “doble alambrado en ambos laterales, a lo largo de la pista”, destinado “a evitar el ingreso del público” a ese sector. También deberán contar con “cuerpos de gatera”.
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El predio deberá tener al menos cinco baños (tres para mujeres, dos para hombres); y habilitación municipal o de la comuna en la localidad donde se desarrolle la competencia, “no pudiéndose emitir más de dos por departamento”. El permiso deberá renovarse cada seis meses.
Las actividades podrán realizarse los días sábados, domingos, lunes y feriados, siempre y cuando no coincidan con eventos similares organizados por el Hipódromo de Tucumán.
Los competidores, por su parte, deberán suscribir un contrato que tendrá carácter de declaración jurada, en los que figurarán los datos personales de los propietarios y nombre del caballo con el que va a competir, peso del jockey y datos personales del juez de carrera y juez de partida, entre otros.