Postergan el debate del Marco Regulatorio del Juego en Brasil
El proyecto de ley que prevé la regulación del juego en Brasil podría ser debatido recién en marzo.
Brasil.- Desde diciembre pasado, cuando Diputados aprobó el régimen de urgencia del proyecto que establece el Marco Regulatorio del Juego en Brasil, las expectativas estaban puestas en que el debate fuera en este febrero. Sin embargo, ya se informó que el mismo se aplazará.
Según se explicó, el Frente Parlamentario Evangélico, el presidente Arthur Lira (PP-AL) y el relator Felipe Carreras (PSB-PE ) suscribieron un acuerdo para llevar adelante la discusión en marzo.
De acuerdo con el líder del Frente Parlamentario Evangélico, Sóstenes Cavalcante (DEM-RJ), el acuerdo se basó en el entendimiento de que el tema sería demasiado complejo para ser tratado en la modalidad virtual, aplicada en la Cámara hasta el Carnaval. “Si ganamos o perdemos la votación es parte de la democracia. Pero el voto a distancia, un tema tan controvertido, puede acabar impidiendo el debate para algunos compañeros que, de forma remota, no son capaces de dedicar la misma atención al proceso legislativo”, afirmó.
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En tanto, Felipe Carreras señaló que no espera obtener ningún apoyo de la bancada evangélica en relación al proyecto, pero prevé cumplir con el acuerdo, a la espera de fin de mes para presentar el informe. El diputado considera que, una vez en el pleno, el proyecto no tendrá dificultades para ser aprobado. “Ya obtuvimos 293 votos a favor en la votación de la solicitud de urgencia en diciembre. Hoy veo una simpatía aún mayor con los medios que anuncian el proyecto”, dijo al medio Congresso em Foco.
Recientemente, en línea con la posición de la banca evangélica, que había manifestado una oposición intransigente, la Conferencia Nacional de Obispos de Brasil (CNBB) publicó también una nota contra la legalización de los juegos de azar en el país. En el artículo, la entidad reiteró su “posición innegociable” en desacuerdo con la movilización realizada en las últimas sesiones de 2021 en la Cámara de Diputados que favorece la regulación.
“El juego acarrea daños morales, sociales y, en particular, familiares irreparables. Además, el juego compulsivo está considerado una patología en el Código Internacional de Enfermedades de la Organización Mundial de la Salud. El sistema altamente lucrativo del juego tiene su cara más perversa en la persona que sufre esta compulsión”, escribieron los obispos.
El proyecto ya presenta algunos mecanismos para tratar de solucionar los problemas mencionados. L semana pasada, Felipe Carreras presentó una nueva versión del texto, con la intención de ganar aceptación.
