Navarra analiza imponer 300 metros entre las casas de apuestas y las escuelas
El parlamento de la comunidad de Navarra estudia una propuesta para imponer una distancia mínima de 300 metros entre las casas de apuestas y centros educativos, y entre cada local de juego entre sí.
España.- El parlamento de Navarra discute varias medidas para combatir el juego problemático, entre ellas, una legislación que impida la instalación de casas de apuestas a menos de 300 metros de centros educativos.
Esta medida es la que impulsan los grupos parlamentarios del PSN, Geroa Bai y Navarra Suma, que alcanzaron un acuerdo, pero todavía no la aprobación del dictamen.
En el marco normativo, se exigirá que en la futura Ley Foral del Juego se establezca que haya una separación mínima de 300 metros entre las nuevas tiendas de apuestas y los centros escolares.
La misma distancia proponen que sea requerida entre los nuevos locales de apuestas que se instalen.
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Además, se realizará un estudio sobre la necesidad o no de prohibir la venta de alcohol en tiendas de apuestas, salones de juego y bingos, y otro sobre la fiscalidad del juego en Navarra.
La distancia entre las casas de apuestas y las escuelas, el eje del debate
El viernes hubo unanimidad en aprobar el dictamen, aunque se pospuso la votación por algunas discrepancias en la reglamentación del mismo.
La presidenta de la ponencia, Marisa de Simón, dijo sobre el debate: «Se trata de propuestas que pretenden proteger, en particular a las personas más jóvenes y menores de edad«.
Según dijo, «los datos indican un aumento exponencial de las apuestas deportivas en estas edades en las que el riesgo de padecer trastornos patológicos relacionados con esta práctica«.
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Una de las discrepancias entre las propuestas presentadas es la de la distancia mínima: mientras el PSN, Geroa Bai y Navarra Suma, que suman mayoría absoluta, abogan por establecer una distancia mínima de 300 metros EH Bildu, Podemos e I-E consideran que la separación debería quedar fijada en 800 metros.
Además, se planteó la creación de un fondo económico constituido con el 2% de los beneficios empresariales del sector que se destinaría a implementar medidas preventivas y para el tratamiento de la ludopatía.