Más de 100 empleos en riesgo: trabajadores de salones de juego de Navarra piden una reunión urgente con el gobierno

Los trabajadores afirman que de aprobarse el nuevo Reglamento de los Juegos y Apuestas de la Comunidad Foral, los salones de juego quedarán en desventaja competitiva contra los bingos.

España.- Los trabajadores de los salones de juego de Navarra nucleados en la Unión de Trabajadores de Salones de Juegos (UTSAJU), han pedido una reunión urgente a la presidenta de la Comunidad Foral de Navarra, María Chivite, por la posible pérdida de más de 100 puestos de trabajo debido a un decreto que, según argumentan, no se ha consensuado con nadie.

Se trata de la futura aprobación del Decreto Foral por el que se aprueba el Reglamento de los Juegos y Apuestas de la Comunidad Foral de Navarra. Como consecuencia, un gran número de trabajadores del sector en Navarra perderán su empleo por un decreto que el gobierno foral ha impulsado sin negociación ni con el sector ni con información a los trabajadores, y que obliga a los salones a cerrar a las 00:30h mientras autoriza a sus competidores, los bingos, a mantenerse abiertos hasta las 03:00 horas de la madrugada cuando hasta ahora tanto salones de juego como bingos tienen autorización para tener horarios equivalentes, hasta las 03:30hs.

Carlos Alejandro Sola, portavoz de UTSAJU de Navarra, considera que debería seguir manteniéndose el horario de cierre actual para ambos tipos de locales, y ha recordado que “la memoria de juego de la Comunidad Foral señala que solo el 0,63 por ciento de las más de 1.500 inspecciones realizadas a salones de juego han finalizado con alguna irregularidad”. Además, el portavoz de UTSAJU en Navarra ha advertido de que con esta medida se perderá mucha recaudación de impuestos para la Comunidad Foral.

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Por todo ello, los trabajadores del sector, alarmados, han dirigido una carta a la presidenta de la Comunidad, María Chivite, pidiéndole un encuentro y remarcando que no solo no han sido escuchados, sino que, además, muestran su perplejidad porque se obliga a cerrar sus locales sin motivo alguno: “Nos condenan al paro mientras favorecen de forma arbitraria a otros”, sentencia en la misiva Carlos Alejandro Sola.