Loterías en Brasil: proponen que sean actividad esencial
El diputado André Figueiredo pidió que los trabajadores de loterías en Brasil sean vacunados como trabajadores esenciales.
Brasil.- La semana pasada, el diputado André Figueiredo presentó una propuesta para declarar a las loterías en Brasil como servicio esencial.
Puntualmente, la intención del legislador es que se considere a los trabajadores del sector del juego brasileño como prioritarios, para que se los incluya en el plan de vacunación contra el Covid-19.
“Desde marzo de 2020, los dueños y trabajadores de los establecimientos de loterías en Brasil han hecho todo lo posible para atender bien a la población, conscientes de su rol social en esta pandemia y de la esencialidad de los servicios que brindamos, especialmente a los más necesitados en el Brasil profundo», sostiene Figueiredo.
El diputado recordó que hay 13 mil establecimientos de lotería en todo el país, distribuidos en el 97% de los municipios y que generan cerca de 70 mil empleos directos.
«Cabe señalar que los empleados de la lotería, en casi el cien por ciento, son usuarios del transporte público y, por estar en primera línea de servicio a la población, además de manipular billetes, pueden -involuntariamente- convertirse en vector de transmisión del virus que ya se cobró más de 310 mil vidas en Brasil», explicó.
Nueva propuesta para las loterías en Brasil
Esta semana, el diputado Aureo Ribeiro presentó un nuevo proyecto que involucra a la lotería en Brasil para recaudar fondos para el estado.
La iniciativa que introdujo el legislador ante la Cámara Federal involucra los premios no cobrados, que serían traspasados al Fondo Nacional de Salud.
Los fondos deben invertirse exclusivamente en acciones para combatir el coronavirus, preferiblemente en la compra de vacunas.
Si bien la oferta de juego es limitada, algunos productos de lotería en Brasil sí están permitidos. Así, Ribeiro busca utilizar los fondos no reclamados de los juegos Mega-Sena, Timemania, Loteca y la Lotería Federal.
En la actualidad, esos juegos aportan al estado, pero los premios no reclamados terminan en el Fondo de Financiamiento Estudiantil y no en la salud.