Legislador insiste con la destitución del director de la Comisión de Juegos de Puerto Rico
El representante José Rivera Madera solicitó al gobernador Pedro Pierluisi que destituya al director ejecutivo de La Comisión de Juegos de Puerto Rico, Orlando Rivera Carrión.
Puerto Rico.- Bajo los mismos argumentos que esgrimieron la semana pasada desde la Unión de Operadores de Máquinas en Ruta (UNOMAR), ahora se suma la voz del representante José Rivera Madera para solicitar la destitución de Orlando Rivera Carrión, director de la Comisión de Juegos de Puerto Rico.
“Le solicitamos al Gobernador de Puerto Rico, Pedro Pierluisi, la inmediata destitución de su cargo a Orlando Rivera debido a todas las acusaciones de viajes pagos por personas que él debe regular o que están en proceso de ser evaluados por la Comisión de Juegos” sostuvo Rivera Madera.
Según el representante, Rivera Carrión aceptó el pago de viajes “de parte de personas que él debe regular o que están en proceso de ser evaluados por la Comisión de Juegos”. De los viajes confirmados, dos fueron a la ciudad española de Barcelona, que habrían sido pagados por empresas con las que el gobierno realiza negociaciones, explican en el medio local Metro.
Según el legislador, “ya es de conocimiento público que los gastos de estos viajes fueron satisfechos por empresas interesadas en traer tecnología de tragamonedas y máquinas de ruta quienes a su vez tenían participación privilegiada en un chat con dueños de máquinas donde se discutían asuntos sobre cambios a la ley que beneficiarían grupos particulares”.
Rivera Madera ya había radicado una querella en febrero en la Oficina de Ética Gubernamental luego de advenir en conocimiento sobre alegadas, “relaciones inaceptables y conversaciones comprometedoras en un chat que dictan mucho de un funcionario que debe mantener intachable reputación de acuerdo con las responsabilidades de su cargo”.
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Al momento de esa denuncia, Rivera Madera, quien también le había pedido en ese momento al gobernador Pierluisi que aparte de su cargo a Rivera Carrión, declaró que era una falta ética grave el hecho de que el director de la Comisión de Juegos haya participado de un chat junto a las personas a las que la entidad debe regular, donde se hablaba del proyecto de ley que buscará aumentar la cantidad de máquinas de juegos de azar autorizadas.
La pieza legislativa fue presentada por Rivera Madera, y propone enmendar la ley 11-1933 para autorizar un aumento en la cantidad de máquinas de juegos de azar autorizadas con el fin de allegar recursos económicos al Estado.
“Nuestra intención, como deber moral, es que estos recaudos sean destinados en un 95 por ciento que considero impostergable, a nutrir el fondo de retiro de la policía destinados a asegurar una compensación digna y aceptable para los uniformados que se retiran luego de prestar un servicio sacrificado y lleno de riesgos”, explicó Rivera Madera.
Respecto a la conversación difundida por medios de comunicación entre el director de la Comisión y personas relacionadas a la industria del juego de azar, el legislador dijo: “De primera intención cuando escuché la noticia me pareció altamente sospechoso que el director de la Comisión (Rivera Carrión) haya estado participando en un chat como el que se alegaba. Pero al leer el contenido de dichas conversaciones difundidas por los medios y las redes, quedé sorprendido en ver que la persona que debe fiscalizar y exigir se cumpla con las leyes y reglamentos que regula esta actividad esté inmerso en una conversación que parece la planificación de un negocio entre socios”, señaló el representante.
La tensa relación con UNOMAR
La semana pasada, la Unión de Operadores de Máquinas en Ruta (UNOMAR), tras conocerse una pesquisa federal que tiene como foco Rivera Carrión por irregularidades, la entidad solicitó su destitución.
“La información que trasciende en torno a que Rivera Carrión podría estar siendo investigado por las autoridades federales valida las denuncias que venimos haciendo desde hace tiempo. Este funcionario, abierta y descaradamente, se ha alineado con los grandes intereses y con sectores a los que debe fiscalizar, para beneficiar únicamente a unos pocos y dejar fuera de la industria de juegos al azar a operadores legítimos de máquinas en ruta como nosotros”, expresó Gilberto Narváez, presidente de UNOMAR.
De acuerdo con diferentes medios locales, el Negociado Federal de Investigaciones (FBI, por sus siglas en inglés) está desplegando una investigación sobre Rivera Carrión. El mismo solicitó a la Cámara de Representantes una copia del expediente sobre las alegadas irregularidades, según precisó El Nuevo Día.
En este documento, se confirmó que constan dos denuncias principales de conflictos de interés. Una de ellas hace foco en la participación de Rivera Carrión en un chat junto a figuras del mundo de los casinos a los que está llamado a fiscalizar. Y otra pone la lupa sobre el reembolso de viajes que el funcionario realizó fuera del país para evaluar propuestas de empresas interesadas en entrar en el mercado de las tragamonedas en Puerto Rico.
Entre los viajes realizados por Rivera Carrión y un grupo de empleados, constan dos a Estados Unidos: uno a Chicago (Illinois) y otro a Las Vegas (Nevada). Una serie de documentos oficiales precisan que el propósito del viaje era “auditar una solicitud de licencia nueva para nuestra jurisdicción” y que los costos serían reembolsados “por empresas reguladas, según establecen los reglamentos del Negociado de Juegos de Azar”. Sin embargo, el punto de conflicto es que los funcionarios no hicieron una consulta ética sobre el viaje.
A estos se sumarían, además, otros dos viajes encabezados por Rivera Carrión. Los mismos habrían tenido como destino a Barcelona, España, y habrían sido pagados por empresas con las que el gobierno realiza negociaciones.
De todas formas, el secretario de Desarrollo Económico y Comercio (DDEC), Manuel Cidre, indicó que la agencia que tiene bajo su ala a la Comisión de Juegos no tomará acción sobre Rivera Carrión hasta que no culmine una investigación de la Oficina de Ética Gubernamental (OEG).
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