El vicepresidente brasileño mostró su apoyo a la regulación de casinos y juegos de azar
Geraldo Alckmin ponderó los beneficios que la aprobación del Proyecto de Ley 2.234/22 traerá a Brasil.
Brasil.- El debate del Proyecto de Ley 2.234/22 tiene a muchos expectantes en Brasil. Es que la norma se encuentra lista para ser votada en el Pleno del Senado y el resultado de esa votación puede cambiar la realidad del sector del juego en el país. Por el momento, la votación en el poder legislativo quedó postergada para octubre de este año, por lo que los promotores de la propuesta aprovechan este tiempo para sumar adeptos en pos de lograr contar con los apoyos necesarios que lleven a la aprobación del Proyecto de Ley 2.234/22.
En este contexto, luego de que hasta el propio presidente Lula da Silva adelantara que no pondrá ningún tipo de trabas para la sanción de la ley, fue quien le sigue en el cargo quien salió a respaldar el proyecto. Geraldo Alckmin vicepresidente de la República también mostró su apoyo a la ley que regula los casinos, bingos y Jogo do Bicho.
“Existe un debate en el Senado federal sobre los casinos. Quiero dejar mi opinión personal, que ya di cuando era candidato a presidente. Estoy totalmente a favor. Las Vegas, en Estados Unidos, empezó con un casino. Y hoy la gente va allí y tiene entretenimiento, espectáculos, música, economía creativa. Apoyo plenamente el sector que distribuye ingresos y emplea a mucha gente”, afirmó el vicepresidente en el marco de la realización del “Salón de Turismo: Descubra Brasil”, que se desarrolla en Río de Janeiro.
El vicepresidente estuvo acompañado por Celso Sabino, ministro de Turismo, quien ya mostró su total respaldo a la propuesta.
El texto de la ley autoriza la instalación de casinos en polos turísticos o en complejos integrados de ocio, con un límite de un casino por estado y en el Distrito Federal, con excepción de São Paulo, que podría tener hasta tres casinos, y de Minas Gerais, Rio de Janeiro, Amazonas y Pará, en los que el límite previsto para cada estado es de dos casinos.
Según la propuesta, también podrán funcionar salas de juego en embarcaciones marítimas y fluviales, que seguirán reglas específicas. El casino deberá demostrar un capital social mínimo integrado de al menos R$ 100m (USD 19m) y podrá ser acreditado por 30 años.
La propuesta también establece reglas para el juego de bingo en modalidades de cartón y electrónico, y permite en cada estado la acreditación de una persona jurídica por cada 700.000 habitantes para la explotación del “jogo do bicho”.
En este caso, las autorizaciones tendrán una validez de 25 años, renovables por igual período. Las carreras de caballos podrán ser explotadas por entidades turfísticas acreditadas en el Ministerio de Agricultura, que también podrán explotar, al mismo tiempo, juegos de bingo y video bingo.