La falta de acuerdos marcó el debate temático en el Senado brasileño en torno al proyecto para regular los juegos y azar y casinos

La sesión del Senado destacó por las divergencias entre quienes apoyan y quienes se oponen al PL 2.234/22.
La sesión del Senado destacó por las divergencias entre quienes apoyan y quienes se oponen al PL 2.234/22.

La votación en el Pleno fue pospuesta para octubre.

Brasil.- La sesión de debate temático del Senado sobre el proyecto que regula la explotación de juegos y apuestas en todo el territorio nacional estuvo marcada por divergencias entre los participantes. Mientras representantes del gobierno y de la industria turística y de eventos, además del relator del tema Senador Irajá, defendieron la aprobación de la propuesta, mientras que otros senadores insistieron en su rechazo.

En la valoración del presidente del Senado, Rodrigo Pacheco, el Proyecto de Ley 2.234/22 es amplio y complejo. Según consideró, por un lado, busca regular actividades que son ilegales desde hace más de 30 años, generando ingresos para el Estado; por otro lado, suscita preocupaciones legítimas en la sociedad respecto del trastorno del juego y sus consecuencias en la salud mental y financiera de la población. Para él, el Senado necesita analizar todas las facetas de la propuesta considerando los impactos en la sociedad brasileña.

«Debemos evaluar cuidadosamente los posibles beneficios, como la generación de empleos e ingresos para el Estado brasileño, pero también los riesgos y desafíos, incluida la prevención del lavado de dinero y la lucha contra el crimen organizado, además del problema social y de salud pública relacionado con el trastorno del juego», destacó el senador.

Por su parte, el relator del Proyecto de Ley 2.234/22, el senador Irajá, afirmó que los países que ya habían regulado los juegos y las apuestas crecieron social y económicamente después de la decisión. En su opinión, es estratégico y necesario buscar poner al país en la ruta turística del mundo, “diciendo no al juego ilegal y clandestino” e imponiendo límites, reglas y supervisión.

A raíz de estas divergencias en el criterio, la votación del proyecto en el Pleno del Senado no se realizará la próxima semana, como se especuló en algunos momentos, sino que ocurrirá en octubre, luego de que se hayan realizado las elecciones municipales.

El texto de la ley autoriza la instalación de casinos en polos turísticos o en complejos integrados de ocio, con un límite de un casino por estado y en el Distrito Federal, con excepción de São Paulo, que podría tener hasta tres casinos, y de Minas Gerais, Rio de Janeiro, Amazonas y Pará, en los que el límite previsto para cada estado es de dos casinos.

Según la propuesta, también podrán funcionar salas de juego en embarcaciones marítimas y fluviales, que seguirán reglas específicas. El casino deberá demostrar un capital social mínimo integrado de al menos R$ 100m (USD 19m) y podrá ser acreditado por 30 años.

Ver también: El ministro de Turismo brasileño volvió a manifestar su apoyo a la regulación de casinos y juegos de azar

La propuesta también establece reglas para el juego de bingo en modalidades de cartón y electrónico, y permite en cada estado la acreditación de una persona jurídica por cada 700.000 habitantes para la explotación del “jogo do bicho”.

En este caso, las autorizaciones tendrán una validez de 25 años, renovables por igual período. Las carreras de caballos podrán ser explotadas por entidades turfísticas acreditadas en el Ministerio de Agricultura, que también podrán explotar, al mismo tiempo, juegos de bingo y video bingo.

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Brasil Proyecto de Ley 2234/22 Senado