El Ministerio de Sanidad español instó a las comunidades a prohibir las casas de apuestas a 100 metros de colegios e institutos
La titular de la cartera, Mónica García, dijo que debe primar la protección por sobre los intereses económicos.
España.- El Ministerio de Sanidad «incitará» a las comunidades a legislar respecto a la limitación de las casas de apuestas a menos de 100 metros de colegios e institutos. El motivo, según la titular de la cartera, Mónica García, es que muchas autonomías anteponen los intereses económicos y comerciales a la protección de los menores al permitir una «proliferación abusiva» de estos locales.
García hizo estas consideraciones a los periodistas tras comparecer en la Comisión Mixta para el estudio de los problemas de las adicciones, en el Congreso de los Diputados. Así, ha mostrado la preocupación de su departamento por las adicciones sin sustancia entre los más jóvenes, como puede ser a los juegos de azar, las apuestas en videojuegos o el uso de pantallas.
Así, recordó que el 5,3 por ciento de la población de entre 15 y 64 años jugó dinero online el último año, algo más de la mitad (el 57 por ciento), de manera presencial; un 1,7 por ciento puede presentar trastorno del juego, y el 3,5 por ciento cumple criterios de uso compulsivo de Internet. Mientras, en los estudiantes de 14 a 18 años, el 20,5 por ciento presenta un trastorno compulsivo de Internet y el 10,7 por ciento ha apostado dinero en el último año. El 17 por ciento lo hizo de forma presencial.
Desde Sanidad quieren impulsar acciones de sensibilización, información, formación e investigación de adicciones sin sustancia y políticas para paliar la situación. «Queremos limitar que las salas de juego estén a 100 metros de los institutos de los chavales y que no proliferen estos negocios como algo normal y natural que ha ocurrido en los últimos años en nuestro país», puntualizó la ministra en su comparecencia.
«Se requieren múltiples acciones y es imposible atacarlas con la libertad de mercado», criticó. La competencia de regular este tipo de locales, lugares «de reclamo y de incitación» a la adicción al juego, es autonómica, pero mientras en algunas hay una por cada 4.000 habitantes, en otras se dispara a 1 por cada 40.000, con lo que priman así «los bienes comerciales» a la protección de la salud de los menores.
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García lamentó la poca regulación por parte de algunos ejecutivos autonómicos: «No les parece mal que las casas de apuestas estén a menos de ‘x’ metros de los institutos o de los «coles» o que haya una proliferación completamente abusiva en las ciudades». Por eso, dentro de sus competencias, el Ministerio pondrá «encima de la mesa todas aquellas cosas que son de sentido común», como es la de no abrir uno de estos negocios en la puerta de un instituto, y va a «incitar a que los gobiernos regionales legislen y hagan iniciativas políticas para limitar este acceso».