El Ministerio de Agricultura de Brasil autoriza a los clubes de jockey a promover las apuestas de caballos
Se espera que la nueva normativa le permitiría a los Jockey Clubs competir con las casas de apuestas extranjeras.
Brasil.- Una buena noticia para el sector del turf en Brasil: el gobierno publicó ayer (8 de diciembre) un nuevo Código Nacional de Carreras (Ordenanza MAPA 526/22) que tiene como principal objetivo regularizar las carreras de caballos en el país.
Un dato clave es que, según la nueva normativa, a partir de ahora, los clubes de jockeys están autorizados a promover apuestas sobre sus carreras. Las autoridades creen que de esta forma, el sector podría competir en igualdad de condiciones con las casas de apuestas extranjeras.
El texto también establece que solo los clubes registrados en el Ministerio de Agricultura podrán promover la captación de apuestas. Además, una comisión de carrera en nombre del club deberá determinar la liquidación de las apuestas en cada carrera.
Según el medio local O Antagonista, actualmente, la única empresa privada autorizada por el Ministerio de Agricultura, Ganadería y Abastecimiento para explorar las apuestas en carreras de caballos es Betsson, a través de una sociedad con el hipódromo de Rio Grande do Sul.
A las complicaciones que trajo la pandemia del Covid-19 se suma la escasez de animales, lo que ha hecho que el turf en Brasil haya entrado en una profunda crisis. Además, en plena pandemia los apostadores decidieron virar hacia las apuestas online, lo cual agravó aún más la crisis.
A raíz de esto, el número de carreras se redujo en el último tiempo e incluso en algunos casos los predios se terminaron expropiando para darles otro uso.
La aprobación de este nuevo código se produce antes de que se apruebe el Marco Regulatorio del Juego en el país, el cual fue aprobado por la Cámara de Diputados en febrero y ahora está a la espera de su aprobación final en el senado. A pesar de que el juego no está legalizado en el país, las apuestas a caballos sí están permitidas desde 1984.
Ver también: El marco regulatorio del juego en Brasil suma un apoyo clave
