El Marco Regulatorio del Juego podría ser debatido en el Senado brasileño este año
El senador Angelo Coronel destacó que la tributación de la actividad de los juegos de azar aumentaría los ingresos presupuestarios del país.
Brasil.- A casi un año de aprobado en Diputados, el Marco Regulatorio del Juego, establecido mediante el Proyecto de Ley N° 2234, sigue pendiente de debate en el Senado. Sin embargo, en este 2023 la discusión podría reactivarse.
El senador Angelo Coronel, del PSD de Bahia, prometió en entrevista con Rádio Senado que en 2023 estudiará la legalización de los juegos de azar en Brasil. Para el legislador, Brasil no puede quedar aislado en la clandestinidad frente a las grandes potencias que ya regularon la legislación sobre la actividad y aumentaron sus ingresos por cuenta de los impuestos recaudados, como Italia, que genera en alrededor del 1,4 por ciento del PIB.
“Hoy los juegos en Brasil se bancan libremente sin tener 1 centavo de impuesto para el brasileño. Entonces la gente también dice: ¿usted está a favor del juego? No estoy a favor de nada de eso. Quiero saber sobre la legalización de lo que existe. Lo que hay es lo que no puede quedar, se pueden bancarizar libremente, sin generar impuestos para la Unión”, afirmó.
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Según el Proyecto de Ley N° 2234, se permite el otorgamiento de licencias permanentes o temporales por parte de la Autoridad Concedente dependiendo de la actividad. La propuesta también permite la instalación de casinos en balnearios o en embarcaciones fluviales. Las salas de bingo se acreditarán mediante licencias con una duración de 25 años, renovables por igual período.
Para el jogo do bicho, el texto de la Cámara exige que las apuestas sean registradas y accedidas en tiempo real por el Sindicato.
Hasta entonces, el tema no ha sido pacifico en el Senado. Uno de los resistentes a este y otros proyectos similares es el senador Eduardo Girão, de Podemos en Ceará. El año pasado, Girão logró crear el “Frente Parlamentario por un Brasil sin Juegos de Azar”. Para él, la legalización de los juegos facilita la práctica de delitos como el blanqueo de capitales, la evasión fiscal, la evasión de ingresos y la corrupción de agentes públicos.
El Frente Parlamentario tiene como objetivo promover debates y adoptar iniciativas que desalienten el juego, con el objetivo de combatir sus posibles consecuencias para la sociedad.