El Hipódromo de Palermo abrió un espacio con ruletas electrónicas
El establecimiento hípico de Buenos Aires cortó las cintas del Salón Leguisamo, en el que las protagonistas son las ruletas electrónicas.
Argentina.- En la previa de fin de año y en el marco de una reapertura de las actividades, el Hipódromo de Palermo hizo un refresh en sus instalaciones.
El establecimiento abrió las puertas de un espacio totalmente renovado. Se trata del Salón Leguisamo, ubicado en el primer piso de la Sala Especial, y el que alude a la figura del mítico jockey Irineo Leguisamo, destacado corredor de las pistas de Palermo.
El salón cuenta con tres mesas de ruletas electrónicas (Alfastreet). Además, se posiciona como el único espacio del hipódromo con máquinas de keno bingo y máquinas de poker.
Por otra parte, ofrece un sector exclusivo de máquinas de alta denominación con importantes pozos progresivos.
A su vez, y para brindar una mejor experiencia a los jugadores, el establecimiento incorporó en el Salón Leguisamo tres cajeros automáticos de cobro y una caja para pagos.
APHARA celebró su 76º aniversario
En el marco de múltiples reclamos en la actividad hípica, la Asociación del Personal de los Hipódromos, Agencias Hípicas, Apuestas y Afines de la República Argentina (APHARA) cumplió 76 años. La entidad gremial, que es conducida por Diego Quiroga, celebró su aniversario el pasado martes 5 de octubre.
En este marco, los dirigentes destacaron el aporte de los trabajadores para la continuidad de la actividad, a la vez que hicieron mención a la salida de la pandemia y al plan de reaperturas para la llegada de la nueva normalidad.
A su vez, lLa APHARA continúa reclamando la vuelta del público al turf, tanto al Hipódromo de Palermo como a las agencias hípicas. Esto en medio de las flexibilizaciones dispuestas en establecimientos ubicados en la Provincia de Buenos Aires. En el arranque de octubre, las autoridades autorizaron hasta un aforo del 50 por ciento en el Hipódromo de San Isidro y habilitaron la Tribuna Paddock. Y a este se sumó el Hipódromo de Hurlingham, que volvió a organizar la clásica “Carrera de la Milla”.