Desde CEJUEGO aseguran que el gobierno español pone en riesgo 50.000 empleos directos del juego privado

El director general de CEJUEGO dijo que el gobierno “demoniza” al sector.

España.- Con el juego público en alza y el sector privado reponiéndose de dos años complicados a raíz de la crisis que significó la pandemia de Covid-19, los empresarios españoles están en alerta, ya que consideran que existe una “demonización” del juego y que hay una vara diferente para controlar al juego público y al privado.

Alejandro Landaluce, director del Consejo Empresarial del Juego (CEJUEGO), le dio una entrevista al medio local Ok Diario en la cual explicó cómo el Gobierno negoció con su sector el borrador de una nueva normativa al inicio de la presente legislatura, para finalmente dejarlo ignorarlos y permitir la publicidad sin restricción horaria del juego público (lotería, euromillones, bonoloto, primitiva, ONCE, el gordo), a pesar de ser el que más consumidores tiene.

Landaluce subrayó que el juego público y el privado “son dos mercados que no se comportan igual” y explicó que mientras durante la pandemia del 2020 el juego público sufrió una leve caída, el privado cayó en casi un 50 por ciento. Una consecuencia que generó una gran repercusión en el empleo creado por el sector de los juegos de azar en el territorio español.

El titular de la asociación que representa aproximadamente al 70 por ciento del sector del juego privado en España, detalló que, frente a los 37.000 empleos creados por el juego público, el privado construye casi 50.000 empleos directos al año que, sumados los indirectos, pueden llegar a los 170.000 más.

Landaluce declaró en el medio español que la patronal que él representa llegó a un borrador de decreto y, tras la pandemia, el Ministerio de Consumo encabezado por Alfredo Garzón tomó un camino diametralmente opuesto al pactado: el Gobierno prohibió la publicidad de 1 a 5 de la mañana del juego privado y se permitió la del juego público en cualquier franja horaria. Una normativa recurrida por el sector privado ante el Tribunal Constitucional y que, con casi toda probabilidad, terminará por dilucidarse ante los tribunales europeos.

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Además, el empresario subrayó que de las 600.000 personas que según el DSM (Manual Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales) juegan en España, sólo 7.500 se encuentran hospitalizadas. Por tanto, si el problema de la ludopatía fuese de la gravedad revestida por las campañas del Estado, ya se hubiera regulado el juego público, la cara del sector con un mayor número de consumidores desde que se comenzó con su regulación en España.

Según las cifras citadas por el medio, siguiendo la Encuesta sobre Trastornos Comportamentales de 2022, el 94,2 por ciento de la población de entre 15 y 64 años ha jugado de forma presencial en loterías, primitiva y bonoloto. 

Los Rascas de la ONCE se colocan en segundo lugar, con algo más del 30 por ciento de prevalencia entre la población. El resto de juegos -en su totalidad privados- apenas llegan al 20,9 por ciento, y por debajo del 1 por ciento en el resto: slots, máquinas de azar, tragamonedas; bingo, juegos de cartas con dinero, juegos en casino, en salas de juego, apuestas en la carreras de caballos, videojuegos, bolsa de valores o concursos en televisión, radio o prensa.

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