Brasil amplía las investigaciones por amaños en partidos de fútbol
La causa judicial es un desprendimiento y ramificación de la Operación Maximum, y su continuación Maximum II, puestas en marcha en febrero y abril de este año, respectivamente.
Brasil.- El ministerio público del estado de Goiás informó este martes que siete partidos del fútbol brasileño, incluido uno del Flamengo, están bajo sospecha de amaño, marcando la tercera fase de la Operación Maximum.
Las nuevas investigaciones, dirigidas por la fiscalía de Goiás, incluyen ocho órdenes de registro e incautación de pruebas en domicilios en varias ciudades del país y amplió las pesquisas a siete partidos de fútbol, entre ellos uno de primera división (Avaí-Flamengo), disputado el año pasado.
Según informaciones divulgadas por medios locales, los integrantes de la mafia ofrecieron USD 160.000 a jugadores del Avaí para perder el partido por un resultado amplio.
El Avaí ganó aquel encuentro, disputado en noviembre de 2022, por 2-1, pero empezó el partido perdiendo con un gol en propia puerta, aunque las autoridades no han aclarado si ese gol está en investigación.
La causa judicial es un desprendimiento y ramificación de la Operación Maximum y su continuación Maximum II, puestas en marcha en febrero y abril de este año, respectivamente, y que conmocionaron al fútbol brasileño por las revelaciones obtenidas durante la investigación. A raíz de las revelaciones obtenidas en el expediente, se han acusado de momento a 32 personas por integrar «organizaciones criminales y corrupción en el ámbito deportivo», aseguraron los fiscales. Además, más de una decena de futbolistas fueron suspendidos de la práctica activa del deporte por su vínculo y participación con redes delictivas vinculadas al amaño de partidos.
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En septiembre la FIFA sancionó a nivel mundial a diez jugadores brasileños y uno argentino por su implicación en los amaños. Tres fueron inhabilitados de por vida y los otros ocho con suspensiones de hasta 720 días.
Al igual que las redes ilegales desmontadas con anterioridad, este nuevo grupo criminal que ahora es investigado se dedicaba supuestamente a captar a jugadores profesionales ofreciéndoles grandes sumas de dinero para que recibieran tarjetas amarilla o roja durante los partidos, para cometer penaltis, con el objetivo de que la red ganase dinero en páginas web de apuestas deportivas.