Puerto Rico activa el reglamento de tragamonedas

Puerto Rico lanzó el nuevo reglamento para las tragamonedas pese a la suspensión del sector por el COVID-19.
Puerto Rico lanzó el nuevo reglamento para las tragamonedas pese a la suspensión del sector por el COVID-19.

El gobierno de Puerto Rico retomó la regulación del sector del juego y, por eso, entró en vigor el reglamento para operar máquinas tragamonedas.

Puerto Rico.- El sector del juego sigue suspendido en Puerto Rico, pero, aun así, entró en vigor el nuevo reglamento de máquinas tragamonedas. Así, las autoridades dejan fijadas las reglas para la operación del segmento, que todavía no está autorizado a funcionar.

El reglamento está en evaluación desde el año pasado y, en diciembre, el gobierno recibió comentarios al respecto. Ya este año, el 5 de mayo, la subsecretaria del Estado informó la presentación de las reglas pertinentes.

Se trata del Reglamento 9174 para la Fiscalización Operacional e Interconexión de Máquinas de Juegos de Azar en Ruta y del Reglamento 9175 para la Expedición, Manejo y Fiscalización de Licencias de Máquinas de Juegos de Azar en Ruta. Ambos documentos marcan el reglamento para las licencias de máquinas tragamonedas en Puerto Rico y su operación.

De cualquier manera, el sector todavía permanece fuera de operación debido a las medidas de prevención del COVID-19. Por ahora, las autoridades solo evalúan cuándo será el mejor momento y forma de abrir, nuevamente, los casinos. Sin embargo, la fijación de nuevas normas le da una mayor seguridad jurídica de cara al futuro.

El sector pide reabrir

El gobierno de Puerto Rico tomó ciertas medidas para reanudar las actividades normales, pero no incluyó a casinos. Por eso, desde el sector apuntaron que están preparados para reabrir sus puertas con un estricto protocolo sanitario.

Ismael Vega, gerente general de Casino Metro, y Miguel Vega, gerente general del Tropical Casino, lamentaron su exclusión. Sin embargo, aseguraron a El Vocero que la industria está lista para reabrir en cualquier momento.

Ninguno de los dos empresarios se mostró especialmente preocupado, pero advirtieron sobre los efectos de mantener las salas cerradas. Según dijeron, dejar a los casinos de Puerto Rico cerrados, también, en la próxima fase de desescalada, podría ser muy problemático para la industria.

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