Madrid habría rechazado nuevamente a Cordish
Según trascendió, la Comunidad de Madrid le habría negado nuevamente a Cordish la posibilidad de desarrollar su proyecto en la región como un CID.
España.- El grupo Cordish podría haber sufrido un nuevo revés luego de una reunión técnica entre los representantes de la compañía y los del gobierno autonómico de Madrid sobre el proyecto de un megaemprendimiento en Torres de la Alameda. Según informó el diario español El Confidencial, la administración de Cristina Cifuentes ha vuelto a negar la petición de la empresa norteamericana de desarrollar su propio “Eurovegas” como un Centro Integrado de Desarrollo (CID).
Según trascendió, el plan de Cordish para la primera fase del desarrollo está basado exclusivamente sobre su oferta relativa al juego y por eso no cumple con la fórmula del CID, que prevé la necesidad de integrar los servicios turísticos, comerciales, de ocio, juego y demás, con otros deportivos, sanitarios y culturales. La figura jurídica permitiría que el grupo con base en Baltimore mantuviera el control sobre el sector en la región por al menos 10 años y, por eso, habían reestructurado -aparentemente sin éxito- el plan que había sido rechazado meses atrás para incluir este tipo de necesidades.
Para cumplir con el requerimiento deportivo, se había incluido una playa artificial con una laguna de seis hectáreas en la que se podría practicar deportes acuáticos y otros playeros como vóley. Sin embargo, el gobierno no está seguro de la capacidad de Cordish de mantener la laguna, ya que habían previsto un sistema basado en el agua de lluvia y en el reciclado de aguas residuales, que no está permitido en España.
Además, el urbanista Leopoldo Arnaiz Eguren, cuya empresa está detrás de la eventual construcción del complejo, no es del agrado de la Comunidad de Madrid. Cordish explicó que tiene el control de las 134 hectáreas donde desarrollaría el proyecto a través del urbanista, que firmó una declaración para la cesión de los terrenos.
Ante una posible nueva negativa del gobierno, Cordish deberá decidir si continúa desarrollando su complejo de entretenimiento sin la figura del CID, algo que supondría un aumento sustancial en los costos y demoraría la puesta en funcionamiento del negocio.