Casinos y bingos argentinos proponen un protocolo para reabrir
Casinos y bingos de la Argentina elevaron un protocolo sanitario para acelerar el proceso de reapertura.
Argentina.- Casinos y bingos de todo el país permanecen cerrados hasta nuevo aviso como parte de las medidas tomadas por el Gobierno nacional para hacer frente a la pandemia del Coronavirus, pese a que las casas de apuestas y loterías, entre otras actividades, ya están volviendo paulatinamente a la normalidad.
Mientras las autoridades estudian cómo salir del confinamiento establecido el 20 de marzo, con los casos de contagios en franco ascenso, la industria del juego reclama reabrir sus puertas para afrontar la crisis económica.
El Sindicato de Juegos de Azar, ALEARA, confeccionó un protocolo sanitario que posibilitaría la reapertura de casinos y bingos con menos jugadores, mayor desinfección y limpieza constante de las fichas, entre otras medidas, que será presentado ante el Gobierno.
Según revelaron desde el Sindicato al diario LA NACION, el proyecto fue recibido «con cautela» por las autoridades y esperan una pronta respuesta.
El protocolo se inspiró en el que se aplica en algunos países que ya rehabilitaron el juego, como Estados Unidos o Italia.
Los puntos del protocolo de casinos y bingos
-Disminución de la cantidad de clientes, de acuerdo a las disposiciones de las autoridades de cada distrito.
-Control de temperatura en los ingresos del público y personal.
-Túnel sanitario en los lugares donde se encuentren disponibles.
-Servicio de traslado de personal, en los lugares en que sea posible.
-Ingreso y turnos escalonados para que no haya superposición en vestuarios o en su defecto que el personal llegue con la ropa de trabajo.
-Distanciamiento de un metro en las filas de clientes de acceso a los locales.
-Desinfección periódica de las zonas de juegos de mesa, máquinas tragamonedas, quioscos electrónicos y sillas.
-Habilitación y cierre de las salas por sectores, a los efectos de permitir la limpieza y desinfección.
-Obligación de utilización de tapabocas y guantes para el personal y asistentes.
-Optimización de ventilación y aireación en las salas.
-Separación física o de distancia entre puestos de juego.
-Reducción de colores en las mesas para disminuir la cantidad de apostadores.
-Obligación del lavado o higienización de manos antes de sentarse a la mesa de juego o tomar puesto laboral.
-Colocación de cartelería que recuerde medidas de higiene y distancia.
-Utilización de naipes plastificados para poder ser desinfectados.
-Las fichas se desinfectarán cada dos horas, con procedimientos de saneamiento adicionales durante todo el día.
-Colocación de estaciones o mesas de desinfección de manos en áreas de juego.
-Demarcación de líneas de espera en cajas y máquinas.
-En los sectores gastronómicos regirán las mismas condiciones que en el resto de los locales de cada distrito.
-Tickets, comprobantes y dinero no se entregarán en manos sino serán apoyados en mostrador.
-Proveedores con acceso restringido durante el horario de funcionamiento.
-Mejorar los tiempos de descanso durante la jornada y francos con el objetivo de que los trabajadores estén menos expuestos
La postura de ALEARA
Según el secretario de ALEARA, Alejandro Fassione «el Estado también necesita que el juego funcione porque es una actividad de alto impacto tributario».
En diálogo con LA NACION, expresó la preocupación del sector por el crecimiento del juego ilegal: «Sin juego legal crece el juego clandestino. Por ejemplo, sin loterías en Argentina el juego ilegal trabajaba con la Quiniela de Montevideo, que no se detuvo. Y ahora las salas oficiales están cerradas, pero con la flexibilización de la cuarentena en muchas ciudades los denominados garitos volverán a funcionar».
«Tenemos a favor que el público que concurre a los lugares ya está acostumbrado a controles y monitoreos que están por encima de la media de otros sitios de entretenimiento, por lo que esperamos que se adapten rápidamente al nuevo modelo», agregó sobre el protocolo de casinos y bingos.