Polémica en Curazao por la vigencia de las «licencias maestras» para operar juegos de azar

Según trascendió, la renovación de las licencias no se hizo de acuerdo a los procedimientos legales adecuados.

Curazao.- Ninguno de los cinco titulares de licencias maestras en Curazao posee una licencia legítima y, por lo tanto, válida para operar o permitir la operación de sitios de juegos de azar en línea. Así lo reveló un reporte publicado en el principal diario del país en su sitio web, Curaçao.nu, que analizó las cinco licencias de juego actuales basándose en una apelación ante la Ordenanza Nacional sobre la Administración Pública.

De acuerdo al informe, los administradores gubernamentales de Curazao no renovaron, conscientemente o no, las licencias emitidas en la década del ’90, de acuerdo a los procedimientos legales adecuados en 2008 y 2013. Por este motivo, las extensiones posteriores refrendadas en 2018 y 2023 se basaron en renovaciones inválidas emitidas anteriormente.

Inicialmente, el error lo cometieron los Ministros de Justicia antillanos Norberto Ribeiro y David Dick, seguidos por los respectivos Ministros de Justicia de Curazao, Elmer Wilsoe, Nelson Navarro, Quincy Girigorie, hasta el actual Ministro de Finanzas, Javier Silvania. Este último debería haber sido más consciente cuando se le preguntó sobre la validez de las cinco licencias de juego online emitidas por el gobierno a principios de octubre del año pasado, aunque evitó profundizar en el asunto.

«Los cinco ‘titulares de licencia maestra’ de Curazao para juegos en línea tienen una licencia válida», explicó el ministro, afirmando que la información del periodista «no era exacta». Las actuales revelaciones cambiaron el panorama.

Según destaca la nota periodística, la renovación de estas licencias sin seguir los pasos legales estipulados legalmente deberá ser resuelta y entender si se trató de un error administrativo que tardó años en salir a la luz, o si, por el contrario, subyacía algún otro interés detrás de esta maniobra.

Las primeras licencias, para Cyberluck y Antillephone, se otorgaron en 1996. En 1998 y 2002, se emitieron licencias adicionales para Gaming Services Provider y Curacao Interactive Licensing. En 2003, el gobierno liderado por Mirna Godett concedió la última licencia de juego online, que era una licencia permanente para The Elite Turf Club, la cual se renueva automáticamente.

La renovación automática de una licencia de juego, como la de The Elite Turf Club, va en contra de los principios de buena gobernanza y es «indeseable porque priva al gobierno de momentos cruciales de evaluación», explicaron. Sin embargo, el entonces Ministro de Justicia, Norberto Ribeiro, concedió dicha licencia a The Elite Turf Club.

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Con el tiempo, la emisión y renovación de licencias por parte del gobierno de Curazao a titulares de licencias en la isla se convirtió en una verdadera preocupación debido a la falta de aplicación de la ley y supervisión sobre el aumento desenfrenado de sublicencias ilegales cuya seguridad no podía ser examinada por el gobierno, eludiendo así la regulación y la supervisión.

A principios de este año, Curazao otorgó a sus titulares de licencias maestras una extensión de licencia de un año hasta que la nueva legislación sobre juegos de azar del país entre en vigor.

Tras la promulgación de la nueva regulación del juego, conocida como LOK, los titulares de licencias maestras pasarán automáticamente al nuevo régimen, siempre que cumplan con las políticas y regulaciones dentro de un período de tiempo específico.

Mientras tanto, a partir del 1 de noviembre, los solicitantes pudieron registrar cuentas a través de la nueva plataforma regulatoria en línea de Curazao. A partir del 15 de noviembre, los titulares de cuentas verificadas ya pueden cargar sus solicitudes.

Pero ahora, la polémica en torno a la renovación viciada de nulidad de cinco empresas generó que ciertos sectores del país pidieran mayor transparencia y que el gobierno explique fehacientemente qué es lo que sucedió durante estos casi 30 años en torno al otorgamiento de las licencias.