El juego sigue cayendo en Panamá
Entre enero y noviembre del último año, el sector del juego se redujo un 3,5% y sigue en baja tras siete meses de caída ininterrumpida.
Panamá.- La situación del juego es crítica en Panamá y las cifras vienen siendo negativas desde hace varios meses. Según los últimos datos, entre enero y noviembre, las apuestas cayeron un 3,5% en comparación al mismo período de 2017 y sumaron su séptimo mes consecutivo en baja.
Las cifras reportadas a la Junta de Control de Juegos (JCJ) indican un caudal de apuestas que asciende hasta los US$998 millones, número que vuelve a ser inferior al del año anterior.
Según denuncian los operadores de juego, los pobres resultados de la industria se deben al impuesto del 5,5% establecido en 2015. El gravamen requiere que el apostador pague al momento de reclamar su dinero (independientemente de si ganó o perdió a nivel general) o cambiar las fichas de las mesas de juego en la caja del establecimiento.
De acuerdo a las cifras publicadas por la industria, la peor parte de esta crisis se la han llevado las mesas de apuestas, que disminuyeron un 27,6% hasta noviembre (US$119.8 millones). Mientras tanto, las máquinas tragamonedas cayeron un 1,5% hasta los US$780 millones.
Pero no solo se trata de recaudación para los casinos o salas de juego, sino que la crisis provocada por el gravamen se ha cobrado, aproximadamente, 7 mil puestos de trabajo en la industria de las apuestas en el país.
