Incertidumbre por legalización de deportes de fantasía
Se desvanecen las esperanzas de legalización de deportes de fantasía tras el fracaso en el Congreso.
Estados Unidos.- Los legisladores de Florida han anunciado que las negociaciones sobre una nueva ley de juegos de azar en el estado están «muertas» durante esta sesión legislativa. Dado que el lapso concluirá el próximo viernes, la expansión de la industria ha fracasado una vez más, así como también los esfuerzos para legalizar los deportes de fantasía (DFS), que no pudieron concretarse incluso habiendo legislaciones independientes aún en discusión.
Algunos legisladores clave tanto de la Cámara estatal como del Senado han confirmado que no podrían elaborar un acuerdo para avanzar en la regulación del juego. El Senado presentó una propuesta para autorizar máquinas tragamonedas en las plataformas de carreras pari-mutuel fuera del sur de la Florida, pero la Cámara buscó limitarlas a Miami-Dade y Broward. Esto parece ser la gran división entre los legisladores.
Según el senador estatal Bill Galvano, el acuerdo fracasado implica que la cuestión de las franjas horarias se resolverá en la corte. A pesar de la sentencia reciente de la Corte Suprema de Florida que favoreció una enmienda constitucional que daría a los votantes el «derecho exclusivo a decidir si autorizan o no los juegos de azar», otro caso aún pendiente decidirá si los condados de Broward y Miami-Dade pueden monopolizar o no las instalaciones.
La incertidumbre del juego no sólo afecta a las franjas horarias y a los deportes de fantasía, sino que también involucra las obligaciones financieras de la tribu Seminole con el estado. La Legislatura de Florida se ha mostrado a favor de la aprobación de un nuevo acuerdo de juego con la tribu, que garantizará al estado un ingreso de 3 mil millones de dólares por los casinos del Seminole.
La tribu ha acusado al estado (y ha sido apoyada por las cortes federales) de violar el monopolio que tienen sobre los juegos de cartas, al permitir la oferta de «jugador-designado”. Sin embargo, los seminoles siguen pagando alrededor de 20 millones de dólares mensuales para mostrar su buena voluntad de resolver cualquier problema con el estado.
Ha habido algunas especulaciones acerca de lo que podría suceder después del último fracaso del proyecto de ley de juegos de azar. El abogado Barry Richard, consejero de una tribu, le dijo a Jim Rosica, de Florida Politics, que los Seminoles «reaccionarían en consecuencia» a dicho fracaso. Agregó que podrían dejar de pagar si el estado no prohíbe esos juegos.