Estudio en España: cae el juego presencial y disminuye la prevalencia del juego problemático

Estudio en España: cae el juego presencial y disminuye la prevalencia del juego problemático

El Plan Nacional Sobre Drogas presentó un informe sobre adicciones comportamentales.

España.- El secretario de Estado de Sanidad, Javier Padilla; el delegado del Gobierno para el Plan Nacional sobre Drogas, Joan Villalbí; y la directora del Observatorio Español de las Drogas y las Adicciones, Begoña Brime, presentaron el informe realizado por el Plan Nacional Sobre Drogas sobre adicciones comportamentales y otros trastornos adictivos.

Entre los datos destacados se desprende que la prevalencia de juego problemático ha descendido un 46 por ciento en España respecto a 2018. Este informe sitúa el juego problemático en el 1,4 por ciento, de los más bajos de la Unión Europea (UE) y es más alto en los hombres (2,2 por ciento) que en las mujeres (0,7 por ciento). 

El informe del Plan Nacional sobre Drogas es descriptivo y está realizado a partir de las respuestas a preguntas específicas incorporadas a las encuestas EDADES 2024 y ESTUDES 2023, cuyos resultados tienen representatividad a nivel nacional. Además, se incorporan los últimos datos del nuevo indicador de personas admitidas a tratamiento por adicciones comportamentales en España, notificados por las comunidades autónomas.

En la población de entre 15 y 64 años, el informe refleja el descenso del 17 por ciento en el juego presencial en los últimos 12 meses respecto a 2020, situándose en el 52,9 por ciento en 2024. La prevalencia del juego de azar online, por otro lado, se mantiene estable y muy por debajo de la del juego presencial (5,5 por ciento).

El informe constata que la mitad de la población, concretamente el 53,8 por ciento, participó en juegos de azar en 2024, aunque la cifra desciende respecto a años anteriores. Estos juegos incluyen desde lotería hasta casinos o bingos, así como otros por internet. La mayor prevalencia sigue estando en el presencial, cuya práctica es mucho más habitual que la del online. Sin embargo, este último atrae sobre todo a la población más joven, descendiendo su prevalencia a medida que aumenta la edad. De hecho, según la encuesta Estudes, realizada a la población de entre 14 y 18 años, en este tramo de edad la prevalencia del juego de azar online en el último año ha alcanzado el máximo desde el inicio de la serie (9,4 por ciento en 2021 frente a 10,7 por ciento en 2023).

Ver también: La DGOJ impulsa el debate internacional sobre el juego seguro en ICE Barcelona

Al poner en valor los datos, Padilla dijo que “son una gran oportunidad para hacer política pública” a lo que agregó que es importante “salir de un ámbito que muchas veces se deja llevar por el sensacionalismo y seguir dando pasos, como contra la adicción al juego, con datos que están mejorando, porque “no hay generación espontánea”.

En concreto, al hablar del uso de Internet, dijo que hay “un discurso en auge catastrofista”, por lo que se debe poner el foco en los puntos negativos, pero no generalizar. Y se debe proteger especialmente en los jóvenes.

El objetivo de este informe es conocer la situación actual sobre las adicciones comportamentales y, en concreto, sobre el juego de azar, el uso problemático de internet, el posible trastorno por uso de videojuegos y el uso de pornografía en España, en aras a conocer su impacto en los hábitos y la salud mental de la población, y cómo evoluciona.

Explicaron que en los últimos años, ha emergido un debate social sobre el juego y sus efectos en la sociedad y se han adoptado diversas normativas, entre otras las orientadas a disminuir la presión publicitaria del negocio del juego y a regular diversos aspectos de los juegos de azar online.

En cuanto a las admisiones a tratamiento por adicciones comportamentales, para el año 2022 las admisiones a tratamiento ascienden a 4.670, cifra algo superior a la obtenida en 2021. Según el informe, el 82 por ciento de estos casos registrados en 2022 fueron por adicción al juego, seguidas, con mucha diferencia, por los trastornos relacionados con el uso compulsivo de internet, móviles o dispositivos electrónicos (9,3 por ciento). Por detrás, se ubicaron la adicción a las compras (3,4 por ciento) y las relacionadas con el sexo (2,9 por ciento).

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