11 casinos de Chile ya funcionan con restricciones
La Superintendencia de Casinos de Juego reveló que 11 casinos de Chile volvieron a la actividad con muy buenos resultados.
Chile.- Tras un cierre prolongado de ocho meses, los casinos de Chile volvieron a abrir sus puertas en las comunas que estaban en fase 3 y 4. En total ya suman once los establecimientos autorizados para operar aunque con restricciones, debido a las medidas sanitarias para controlar la pandemia del Covid-19, entre las que se destaca el aforo limitado al 30%.
La compañía Marina del Sol tiene un solo casino operativo en Calama; Enjoy reabrió cuatro -los casinos de Coquimbo, Viña del Mar, Rinconada y Antofagasta-; Sun Dreams reabrió su local en Monticello; el grupo Boldt-Peralada está operando su casino de Ovalle; la compañía Almacruz tiene al Casino de Colchagua en funcionamiento; el Casino de Copiapó también volvió a funcionar; Casino Luckia Arica, retomó el 26 de noviembre; Casino de Juegos del Pacífico también está en funcionamiento.
Según publicó el diario El Mercurio, las empresas calificaron positivamente los protocolos para la industria y vieron con buenos ojos los primeros resultados de la reapertura.
El protocolo incluye las medidas comunes a todos los locales comerciales, como uso de mascarillas, alcohol gel, permanente desinfección, entre otras, exige un distanciamiento de 2 metros entre máquinas de juego, que además deben estar en terrazas. Según la SCJ, en fase 5, los establecimientos podrán funcionar a un 50% de su capacidad.
En tanto, los gremios están pidiendo a las autoridades que autoricen el regreso de las mesas de juego en la fase 4. Esto tiene que ver con el fuerte impacto en los puestos de trabajo de las restricciones.
“Es necesario que abran las mesas, porque hacen la diferencia, y recién podrán abrir en etapa 5. Acá en Enjoy Coquimbo somos 800 trabajadores, y estamos trabajando la mitad”, dijo a El Mercurio el presidente del sindicato de ese casino, Francisco Muñoz.
Desde otras organizaciones se pidió que permitieran trabajar a los crupiers porque eso «aumentaría en 100 a 150 los trabajadores en actividad».
